Bismillah
Algunas de las musulmanas conversas a menudo en nuestro primer año tomamos conciencia del tiempo que perdimos en la práctica de otras religiones y a veces en el afán de hacer lo correcto y sugerir el bien a quienes amamos como familia y amistades cercanas, logramos el efecto contrario, en lugar de acercar a las personas que amamos a la práctica del islam las alejamos. Astagfirullah por el pasado.
Imam Maalik Ibn Anas (que Allah tenga misericordia de él) dijo a un joven de los Quraaysh:
» Oh sobrino, aprende buenos modales antes de aprender el conocimiento» Por lo tanto – Oh siervo de Allah – es necesario para ti ser suave en tu da’wah y no ser duro con la gente. No apartes a la gente del Din debido a tu dureza, ignorancia, u otro comportamiento tal. Al contrario, sé tierno, indulgente y paciente; y sé suave y agradable en tu habla, de modo que tus palabras tengan un efecto en el corazón del hermano, o que tal vez tenga un efecto en la persona a la que le estés haciendo el llamamiento. Entonces la gente apreciará mejor tu llamada e invitación. Así, la severidad excesiva hace que la gente se distancie, no se acerque; y esta causa separación, no unidad. De este modo, es un deber ser suave, como el Mensajero ﷺ dijo: «Ciertamente la dulzura no entra en algo sin que lo embellezca, y no es arrancada de algo sin que esto se desfigure». Relatado por Muslim (16/146) de ‘Aisha رضي الله عنها –
Si ahora que eres musulmana vez de manera diferente casi con asombro a los no musulmanes, a tus seres queridos y a los no tan queridos, detente, toma aire, conserva la calma e imagina como esas mismas personas pueden ver lo diferente que tú les resultas. Entonces encontrarás muchos motivos para agradecer a nuestro creador por que llegaste a comprender la belleza del islam y ejercitarte en el propósito de adorar a Dios, recordando que no nos corresponde juzgar.
No es coherente que expresemos el islam es bello y que nuestro amado profeta se le conoce como el sello de los profetas o el profeta de la misericordia y nosotras mismas carecer de misericordia e invitar al islam de mala manera, atacando y juzgando sin comprender la historia del otro que incluso puede tener un pasado menos bochornoso que el nuestro.
No seamos ingratos con nuestro creador ni con quienes son nuestra familia, vecinos, amistades o compañeros, agradezcamos que respetan o al menos intentan hacerlo, nuestra decisión de vivir acorde al islam, entonces expresemos de manera más frecuente nuestra gratitud hacia ellos, hay muchas maneras de mostrar la gratitud, por ejemplo con la caridad de una bella palabra, una sonrisa o una colaboración a quién necesita nuestro apoyo, seamos de los que facilitan los asuntos y no de los que los complican.
Los musulmanes y las musulmanas pronunciamos la palabra Alhamdulillah que significa: “las alabanzas son para Allah”, de manera frecuente, es la forma en que expresamos nuestro agradecimiento a Allah por todas las buenas cosas que nos ha concedido, por lo que ha apartado de nuestro camino para facilitar la práctica de la religión. Es importante y recomendable también decir ‘’alhamdulilah’’ cuando recibes un regalo, una noticia, un premio, una recompensa, una excelente calificación, etc. .
Alhamdulillah por el tiempo y el conocimiento que nos permite ver la realidad de manera diferente. Gracias a todos por la disposición, quiera Allah mantenernos en el camino recto. Que la Paz y las Bendiciones de Allah alabado y exaltado sea estén con el profeta Muhammad, sus familiares y sus compañeros bien guiados. Pedimos a Allah que nos incluya en su misericordia en esta vida y en la otra.
María del Pilar Mena Parra
Musulmana conversa Colombia
Psicóloga
